Carrió, no hay roto para tu descosido

Estamos hartos de lo tanático.

¿Qué necesidad interna, personal, política, tenía E. Carrió por pronunciar esa horrible frase que dijo en el CCK al tomar las riendas del discurso macrista? “Nos van a sacar muertos de Olivos”. ¿En qué cabeza democrática cabe que a un funcionario del gobierno que perdió las elecciones haya que sacarlo “muerto” del epicentro del poder político? ¿Por qué no podría ella salir por sus propios medios, caminando, o no ir, quedarse en su casa si la escena se le hace insoportable?

A mí me hizo retrotraerme casi cuatro años, cuando asumió Cambiemos. Las doce horas que le quitaron al gobierno de Cristina se debieron, creo, a una imposibilidad inentendible de Macri de enfrentarse con Cristina, no en el sentido de confrontación sino en el de cara a cara: no la puede ver. En este caso, de ganar en octubre, la imposibilidad sería con el gobierno que integra Cristina, o quizá Cristina representara ya entonces, para el actual presidente, al peronismo.

Estamos cerca de descubrir que el odio tan intenso que sienten por la ex presidenta no se originaba en Cristina por ella misma, por sus particularidades, sus cadenas nacionales, su maquillaje o su soberbia. Se originaba en las políticas que aplicaba. El odio que fabricaron por cada detalle personal de la ex presidenta se parece mucho al sexismo, que no funciona contra todas las mujeres. No funcionó para Awada ni para Bullrich ni para Vidal. Las tapas jugosas y vendedoras que se perdió Noticias por no abordar el personaje político de Vidal son incontables. El sexismo es absolutamente selectivo. Y es una herramienta del poder patriarcal, que celebra a las mujeres
como las de Cambiemos y apunta contra mujeres como Cristina.

Entre las cosas que queremos sacarnos lo antes posible de encima es el tono tanático, vinculado a la muerte y a lo oscuro, que escuchamos siempre en boca de ellos para referirse a alguien que a nosotros nos gusta o que queremos. No hace falta que nadie muera, Carrió. Ya murieron bastantes personas en los últimos años por violencia institucional o por negligencia o impericia, como en el caso del Ara San Juan o el caño de gas de la escuela de Moreno que se llevó las vidas de Sandra y de Rubén. Los que votamos al Frente de Todos no queremos más oscuridad ni sentimientos de bajofondo. Todo lo contrario, Carrió. Queremos ganar y que ese día presencies la ceremonia de traspaso y después te vayas a tu casa a seguir con tu vida. No hay un roto para tu descosido.

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5 comentarios

  1. ¿Cuál es el poder de Carrió? ¿Quiénes le dan cámara? ¿A quiénes convence? Estoy todavía buscando las respuestas.

  2. Dan miedo. Son peligrosos, son dogmáticos que se basan más x la fe que por la razón, no necesitan basarse en datos alcanza con sus percepciones y perjuicios, se creen dueños de la verdad pues esta se las ha dado Dios que ha puesto a las fuerzas de seguridad para confirmar y convencer de su veracidad. Gente que se cree profundamente democrática siempre que elijas libremente sus principios caso contrario te mueven intereses y no principios. Han naturalizado es estatus quo que creen que lo establecido x los poderes es la verdad y cualquier cuestionamientos es contra Natura. Están cómodos porque pertenecer les trae muchos beneficios de los cuales está convencidos que se lo merecen como así que los de bajos se merecen la nada. Para ellos es muy injusto hasta casi inadmisible que la plebe le muestre sus inconcistencia. Etc etc etc. Pobre.. salir del narcisismo es un camino muy largo y doloroso no exento de recaídas. Por lo menos así lo veo yo.. diría un viejo comentarista deportivo.

  3. No resulta en absoluto extraño lo que dijo «esto». Y digo «esto», porque resulta imposible catalogarla como humana, y decir que es un animal o un mineral, sería faltarles el respeto los otros dos reinos.
    Si puedo decir y haciéndome cargo que «esto» forma parte de una asociación ilícita que por el odio de muchos argentinos se convirtió en gobierno. Y lo peor es que sin figurar en ningún ministerio, es considerada como una líder del mismo.
    «Esto» es un ente INSANO E IRRECUPERABLE.
    Pero tiene espíritu genocida. De eso hay que cuidarse. Por lo menos hasta el 27 de octubre (si es que llega).

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