Tienen menos de veinte años. Son de Tandil y muy amigos. Crearon un fertilizante que no daña ni a la tierra ni a lo que ella da. Está siendo probado en un campo de Las Flores.
La reestructuración de la deuda argentina, bajo los focos mundiales, encontró a un protagonista que recién conocemos pero que define la situación y ya deja claro por dónde va a ir.