El 24 de octubre de 1981, en plena dictadura genocida, la hinchada de Nueva Chicago entonó la marcha peronista durante un partido contra Defensores de Belgrano. Como respuesta, la policía decidió reprimir a la hinchada apaleándolos a la salida y deteniendo a 49 de ellos. El jefe del operativo fue Juan de Dios Velaztiqui quien dos décadas después, asesinó a balazos a tres jóvenes (Maximiliano Tasca, Cristian Gómez y Adrián Matassa) en los que se conoció como “La masacre de Floresta”. Velaztiqui fue condenado a prisión perpetua por esos crímenes.
La prepotencia policial de aquel día de 1981 motivó que en muchos estadios se repitieran conatos de rebelión política. El rumor empezaba desde las populares hasta las plateas, incluso contaminando a las hinchadas visitantes. La melodía que más les fastidiaba a los uniformados subía desde el césped hasta el barrio. Desde la garganta hasta el túnel desde donde salían los jugadores. Para 1982 se convirtió casi en un ritual. La dictadura estaba siendo acosada por simples gargantas.
Pasaron casi 44 años de esa fecha y la golpiza sobre los jubilados, sumados a un testimonio de un adulto mayor, gaseado por las fuerzas de Patricia Bullrich, motivó la última semana la solidaridad de los hinchas de Chacarita. Para el próximo miércoles simpatizantes de decenas pondrán sus colores como reparo a tanta represión. Será el momento, también de recordar, que durante la dictadura genocida desaparecieron 19 futbolistas. Dicen los adultos mayores que semanalmente se concentran para manifestar contra el gobierno que sus nombres estarán presentes como luces y como escudos. Y que incluso se harán presentes en las camisetas de los pibes y pibas que concurrirán en salvaguarda de su legado. Ellos –que estarán en primera fila como protección y resguardo– son: Raúl Bru, Luis Ciancio, Manuel Cisneros, Osvaldo Cuesta, Ricardo del Río, Daniel Favero, Pedro Frías, Alberto Garbiglia, Juan Carlos Luna, Carlos Manfil, Gustavo Olmedo, Francisco Pana, Hugo Penino, Rodolfo Prestipino, Antonio Piovoso, Eduardo Requena, Carlos Rivada, Ernesto Rojas y Rubén Santucho.
Un Frente Amplio de jugadores desaparecidos, jubilados con coraje e hinchas de fútbol nos está convocando el miércoles 13 de marzo. Una alianza de esas características puede seguir empujando la pelota hacia el área chica. Hasta es posible que los liber-atroces cometan penal. Con la selección de esos tres componentes colectivos, aparece como imposible que Javier Milei o Waldo Wolff pueda atajar alguna pelota. Y menos aún que Patricia Bullrich salga indemne de su proverbial barbarie y crueldad. El partido recién está en el inicio.
